Obra

La serie Corte, Herida y Cicatriz (2024) es una investigación plástica que retoma la técnica del bordado como medio para explorar las inscripciones del dolor, la herida y el duelo, resultados del quiebre, de la ruptura de los vínculos que hemos construido. La rasgadura del papel, como la herida misma, es irreversible, y su cicatriz, imborrable; sin embargo, el remiendo (sutura) de dicho corte, a través del bordado y del patrón, le imprime a la herida una reivindicación casi poética: la cicatriz se transforma en traza, dibuja la ruta que seguirá el patrón en su incansable intención de restauración. Por otro lado, esta es una pieza que no solo alude a las continuidades, a los actos de cuidado y reparación, sino también al retorno constante, no solo visual, sino a aquel retorno conductual que muchos cimentamos con la perpetuación consciente o inconsciente de ciertos patrones familiares y generacionales; o en contraparte, con la conciencia de su ruptura y transformación.

Finalmente, esta pieza busca hablar del proceso mismo del dolor, de su relación cercana con la persistencia, el amor y el cuidado, pero también de la manera en la que se nos orilla a superar el dolor, a obviarlo, a pasar la página incluso a destiempo, asumiendo la cicatriz aún abierta, porque el mundo no para. Aún así, en medio del caos cotidiano, hemos logrado encontrar un oasis para hacer de la herida música, poema, arte.

Laura Páez, Curadora e Historiadora de Arte